de "quejas y garabatos" (2003)

el mago de Oz ama

cae la serpiente,
se desploman sus dos cabezas.

yo río, gozo,
mientras dos zancudos expansivos
la picotean
y el veneno se extiende
por sus huevos.


de pronto mi piel se eriza,

sudo, y mi garganta se calienta;
te posas en mi cuerpo
y el calor sube, flota hacia mi cabeza.
empiezo a gemir.

no es que me excites.

es que quiero vomitar
el puto alcohol que traigo dentro.